Aura

¿Qué somos?,  aquella fascinante pregunta, y un tanto ilusa de cuestionarnos por un quién como si fuese posible encasillarnos y ser absolutos. Si somos volátiles y ególatras, si somos mezclas no homogéneas, si somos todo y nada a a la vez.

Carlos Fuentes nos sumergió en sus aguas y nos llevó a hasta Aura. Oscura, misteriosa, de ratas negras e inmundicias, besos y sexualidades, así es la casa, una casa soñada, donde nos sentimos nosotros y no hay jueces, no hay ojos ni triángulos.

Con una mirada profunda y pueril, capaz de despertar bajos instintos y de estremecer hasta al más recio de los gigantes.

La historia comienza con un joven llamado Felipe Montero que se encontraba tomando un café cuando de repente  su mirada  se posó a leer un anuncio que llamo mucho su  atención,  el pensó  que ese anuncio fue hecho para él ya que cumplía con todos los requisitos  y aparte era buen salario.

Pasaron los días y dejo pasar ese anuncio, cuando de nuevo apareció, pero ahora con una mayor oferta. Llego al edificio de la dirección anotada en el anuncio , era un pasillo oscuro no veía nada y eso que eran alrededor de las 5 de la tarde cuando arribó al lugar, ,solo escucho una voz de un señor que le dijo la dirección correcta para llegar a la puerta(subiendo las escaleras y que empujara la primer puerta que se topara).llegando a la puerta escucho la voz de una señora que le dijo que caminara derecho hacia ella ( ya que la casa era oscura igual que el pasillo por el que entro que no se veía por donde pisaba ) , llegando a ella lo tomo de la mano y Felipe Montero explico sobre el anuncio que vio pegado que casi era perfecto para él. La anciana empezó a cuestionarle sobre todos los requisitos que si sabía francés y que si había vivido allá y todo eso. En fin que Montero termino aceptando el trabajo ,

Una muchacha que vivía con la anciana llamada Aura bajo a recibir y guiar al Señor Montero a su recamara. El señor Montero quedo Atónito ante Aura, aunque solo alcanzo a verle los ojos ya que ella era tímida, con una actitud reprimida y nunca alzo la cara ,pero con solo verle los ojos le basto al señor Montero para caer en las redes del amor.

Ese día el señor  Montero fue a ver a la anciana para lo que fuera su primer tarea, entro al cuarto de la señora , oscuro como toda la casa, se tenía que guiar con un candelabro que le había prestado Aura , y la anciana le dice que cheque en unos cajones de la esquina , era la primera  parte de todo el trabajo que tenía que hacer

Después de ese día,  las cosas empezaron a tornarse un poco extrañas  y a la vez favorables; Favorables porque cada día que pasaba se empezaba a llevar mejor con Aura, tanto que ya tenían horario para verse por  las noches. Así pasaban los días, hasta que una noche se produjo un ambiente de completa sensualidad entre dos personas que se quieren; al despertar sintió que había una presencia más en la habitación, esta era la de la anciana.

Desde ese momento sintió que las cosas se ponían más extrañas, como si la anciana y Aura se movieran al mismo ritmo, como si una dependiera de la otra

Era la última parte del trabajo que le habían asignado y saco todo desde el fondo del cajón que tenían las hojas y se encontró con unas fotos del general  Llorente y la señora Consuelo , se parecía demasiado a Aura y el señor le daba un aire a sí mismo , por lo que regreso a la noche siguiente a hablar con Aura, pasaron las horas y se quedó dormido; Cuando despertó  se dio cuenta que en realidad estaba tocando a la anciana consuelo y el no repelaba , en cambio siguió con el ritual , cuando ya de pronto era otro…  el general Llorente había regresado. 

Este texto nos da aliento a una atmósfera de sombras y ecos donde está manifiesto el tema de la verdadera identidad, y el amor vuelve a unirse, por encima del tiempo, a través del mal y de la muerte. 

"Hay que morir antes de renacer"